¿Cómo te sentirías si cada semana tuvieras un momento para ti?

Para cuidarte.

Para compartir con otras personas que te escuchan sin juicios.

Para iniciar un viaje de autoconocimiento y crecimiento emocional.

Haciéndolo desde tu cocina, un lugar dónde te encuentras segura.

Con una actividad con la que vas a disfrutar y que te va a permitir centrarte en el aquí y ahora.

Para eso nace “Recetario del bienestar” 

Una membresía para la autoexpresión en la que, a lo largo de 12 meses, te guiaré por un viaje gastronómico para trabajar tus emociones y tu inteligencia emocional a través de la cocina.

Cada mes pondremos el foco en una habilidad de gestión emocional para que la integres y puedas recurrir a ella cada vez que lo necesites.

Será tu refugio y tu herramienta para cuidarte cada día, no solo a nivel físico, sino también a nivel mental.

Cuidar el cuerpo está bien, cuidar la mente es fundamental.

¿Qué vas a encontrar dentro?

• Encuentros semanales online en directo. Cada mes está dedicado a un tema específico que trabajamos de manera semanal combinando la inteligencia emocional con la práctica culinaria.  En cada encuentro te iré guiando en el cocinado para que aprendas a reconocer tus emociones y cómo gestionarlas. Si no puedes acudir a alguno, tendrás disponible la grabación.

• Comunidad y grupo de apoyo. Entras a formar parte de un grupo exclusivo de WhatsApp con personas afines a ti donde compartiremos experiencias, dudas, logros, recetas y todo lo necesario para tu bienestar emocional, ese apoyo diario de una comunidad que te entiende.

• Recursos prácticos. Tienes acceso a una amplia gama de recursos como guías, vídeos y ejercicios que te permiten reforzar tanto tu aprendizaje como la práctica culinaria.

Recetario de bienestar no es una membresía para aprender a cocinar.

Sí, vas a aprender porque será nuestra herramienta, pero a lo largo de estos meses vas a lograr

• Autoconocimiento. Todas las actividades culinarias están diseñadas para que profundices en tu propio conocimiento y para que aprendas a gestionar tus emociones.

• Mejorar tu comunicación y tus relaciones. Al cocinar en grupo y compartir experiencias conseguirás desarrollar habilidades de comunicación y empatía, lo que te lleva a mejorar tus relaciones personales y profesionales más allá de la cocina.

• Resiliencia y creatividad. El enfrentarte cada semana a desafíos culinarios y emocionales de manera guiada y acompañada hace que desarrolles tu capacidad de adaptación y de solucionar problemas de manera creativa.

• Habilidades de cocina conscientes. Mientras aprendes a cocinar practicas la atención plena, por lo que será un momento de desconexión y de descubrir la relación entre la alimentación y tus emociones.

• Una vida más equilibrada y satisfactoria. Las herramientas de gestión emocional que aprendes en la cocina las puedes extrapolar a cualquier situación de tu vida diaria, lo que hará que encuentres un mayor equilibrio, satisfacción y bienestar general.